El enlace iónico es el tipo de enlace en el cual los electrones pueden ser transferidos de un átomo a otro, lo que resulta en la formación de iones positivos y negativos. Las atracciones electrostáticas que se dan entre los iones positivos y negativos mantienen unidos a los compuestos. Es también conocido con el nombre de enlace electrovalente y es un tipo de enlace formado a partir de la atracción electrostática entre iones de carga opuesta en un compuesto químico. Este tipo de enlace se forma cuando los electrones de valencia que se encuentran ubicados en una posición más externa de un átomo se transfieren permanentemente a otro átomo. El átomo que pierde los electrones se convierte en un ion de carga positiva o catión, mientras que el que los obtiene se convierte en un ion de carga negativa o anión.
Temas relacionados
Enlace covalente, enlace metálico, enlaces químicos, enlace glucosídico
El enlace iónico es en el cual los átomos tienen la capacidad de transferir o de compartir sus electrones de valencia. Algunos ganan y otros pierden electrones para producir una configuración de gas noble.
Algunas de las características más notables de los enlaces iónicos son las siguientes:
Para que la formación de un enlace iónico se produzca de manera correcta, debe de haber una reacción o una combinación de reacciones químicas. El enlace iónico sucede cuando se da una unión de dos átomos por medio del enlace iónico, que sucede cuando un electrón abandona el átomo que tiene menor carga electronegativa y pasa a formar parte de la nube electrónica del átomo que es más electronegativo. Los enlaces iónicos se producen entre iones de diferente signo pues las cargas de diferente equivalencia se atraen.
Los enlaces iónicos se clasifican dependiendo de los iones que posean sus compuestos. De esta forma, existen aniones y cationes.
Los aniones son iones que poseen una carga eléctrica negativa. Los aniones no poseen una gran cantidad de electrones y están formados por no metales, aunque existen algunos pocos que son metales y no metales. Algunos ejemplos de ellos son:
Los cationes son iones que poseen una carga eléctrica positiva. Los cationes más comunes que existen se forman a partir de metales, aunque algunos son no metales.
Algunas de sus principales propiedades son las siguientes:
Están formados por un átomo unido a otro por medio de un enlace covalente, los electrones de enlace son compartidos por ambos átomos. En el enlace covalente, los dos átomos no metálicos comparten uno o más electrones, es decir, se unen a través de sus electrones en el último orbital, el cual depende del número atómico en cuestión.
El cloruro de sodio o la sal común es un ejemplo de enlace iónico: cuando se prepara se combinan sodio y cloro, perdiendo el primero un electrón que es capturado por el segundo. De esta manera se forman dos iones de carga contraria: un catión que tiene carga positiva y un anión que tiene carga negativa. La diferencia entre las cargas de los iones provoca entonces una fuerza de interacción electromagnética entre los átomos que es capaz de mantenerlos unidos. El enlace iónico es la unión en la que los elementos involucrados aceptarán o perderán electrones. En la solución, los enlaces iónicos pueden romperse y se considera entonces que los iones están disociados.
Briceño V., Gabriela. (2018). Enlace iónico. Recuperado el 22 febrero, 2024, de Euston96: https://www.euston96.com/enlace-ionico/