Si eres un amante de los deportes, es probable que hayas escuchado hablar de los músculos del manguito rotador, los cuales son un grupo de cuatro músculos pequeños que se localizan en el hombro y que ayudan a estabilizar la articulación del mismo manteniendo todos los huesos de esta articulación en sus posiciones correctas. El más pequeño de estos cuatro músculos del manguito rotador se conoce con el nombre de músculo supraespinoso.
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Músculo espinoso, músculo infraespinoso
Es un músculo piramidal que tiene su origen en la fosa supraespinosa del omoplato o escápula. Es un músculo profundo que no puede ser palpado con mucha facilidad y que se encuentra cubierto por el trapecio.
El músculo supraespinoso es uno de los seis diferentes músculos cortos que se localizan en el hombro, a lo largo de la superficie superior del mismo y que se extiende desde el omóplato hasta llegar al húmero. Este músculo junto con otros son conocidos en conjunto como el manguito rotador y se encarga de darle estabilidad al hombro.
Las principales características que podemos observar en el músculo supraespinoso son las siguientes:
El músculo supraespinoso se encuentra ubicado en la depresión ubicada por encima de la espina del omóplato, en la superficie posterior.
El músculo supraespinoso se origina en la fosa supraespinosa de la escápula, la cual está localizada en la superficie posterior de la escápula, superior a la espina de la misma. Luego pasa por la parte baja del acromion para insertarse distalmente en la faceta superior del tubérculo del húmero, que se encuentra superior a la inserción del músculo infraespinoso en el húmero.
La función principal del músculo es la de proveer estabilidad dinámica al hombro para mantener la cinemática articular esferoidea en una posición adecuada. Es un músculo rotador y depresor de la cabeza humeral que sirve para estabilizar, empujando la cabeza contra la concavidad de la glenoides, y además controla de forma activa el fulcro durante el movimiento de la articulación gleno-humeral cuando se eleva el brazo. Brinda además protección al hombro durante la elevación del brazo, refuerza la cápsula gleno-humeral, mantienen la cabeza en la cavidad glenoidea, aportan estabilidad articular y mantienen el fulcro durante la elevación del brazo.
La tendinitis de este músculo implica la tendinitis del manguito de los rotadores, pues es éste músculo es que siempre resulta afectado debido a su posición. Es una inflamación que se da en el área del hombro, específicamente en el manguito rotador y por lo general se se ocasiona debido a diferentes causas, puede ser debido al tipo de actividad que se realiza diariamente, a un desgaste de la articulación, debido a una caída que produce un traumatismo, por un proceso inflamatorio, una biomecánica inadecuada o a un golpe fuerte que lesiona el hombro.
La tendinitis del supraespinoso puede ser tratada por medio de fisioterapia junto con medicamentos para reducir el dolor y aliviar la inflamación principalmente en fases agudas de la patología. Se suele aplicar hielo o crioterapia, técnicas de bombero y tracción, y algunas técnicas analgésicas como por ejemplo la electroterapia. El cambio de hábitos, la realización de ejercicios en casa y los masajes y estiramientos son también parte importante del tratamiento.
Los desgarros o roturas que se dan en el manguito rotador pueden ser parciales o totales y afectan al músculo supraespinoso. A pesar de que la rotura no tiene cura, es posible volver a hacer que el músculo funcione de manera normal, en algunos casos sin necesidad de cirugía. Se ocasiona principalmente por traumatismos o luxación de hombro que causa un estiramiento brusco de los tendones. El riesgo de desgarros aumenta cuando existen calcificaciones que vuelven el tendón rígido y frágil. También puede ocasionarse por la edad.
Cuando hay una rotura se presentan síntomas similares al de una tendinitis en el hombro. El síntoma más común es dolor en la parte lateral o antero-externa del hombro el cual se puede irradiar por el lado del brazo hacia el codo limitando el movimiento del brazo hacia arriba y hacia los lados. La mayoría de los desgarros no requieren cirugía excepto los desgarros completos que limitan la capacidad de levantar el brazo. El diagnóstico se obtiene con una ecografía y una resonancia magnética. La palpación dolorosa aportar importante información. El objetivo del tratamiento para el desgarro o rotura incluyen reducir la inflamación, reponer el rango de movimiento y restaurar la fuerza.
Los principales cuidados ue se le deben de brindar al supraespinoso son
La principal importancia el músculo supraespinoso es que ayuda a dar movilidad al hombro, ayuda junto con los demás músculos del manguito rotador a darle estabilidad y fuerza al hombro y por consiguiente al brazo.
Briceño V., Gabriela. (2018). Supraespinoso. Recuperado el 24 febrero, 2024, de Euston96: https://www.euston96.com/supraespinoso/